Estàs en un hetero bar de esos modernos del barrio, plagado de chicos (ya no) tan jovenes aspirantes a todo. Te giras impulsada por un resorte. Què ye ha hecho girar el cuello en esa dirección? Ni idea! Fijas la mirada en una chica demasiado alta (para la media del garito), morena, tez muy blanca, rasgos angulosos… está a lo suyo , te detienes un Segundo más de lo estrictamente necesario. Un observador independiente creería que la reconozco aunque estoy intentando hacer memoria sobre de que y de donde. No la conozco, of course. Me gustaría, claro. Sentir ese noseque (ya tan poco frecuente). Recordar que es eso, lo único. Lo que me ha traído aquí. Esa soy yo (aunque casi nadie lo sepa)…
No hace falta que lo sepan (a ver). Demasiado íntimo (para lo que yo soy y acostumbro)
Pienso en las noches del Fulanita (seguirá abierto?), me traslado allí, todas estas chicas podrían ser de aquellas noches, las miro, las conversaciones, el perfil, el percal, no hay demasiado chicos en el local en ese momento (o yo no los veo).
Què ganas de besar a una chica en una esquina del bar mientras suena la música!
Madre mía!
Aún así? A estas alturas…
Vuelvo de mi mundo, no sè de que hablan en mi corrillo.
Sonrió como si me interesase (Seguramente me interesa), un trago a la cerveza…
Me la acabo, me siento alto mareada ya, me despido…
Nos vemos el lunes .
Camino a casa pensando en ese momento, me meto en cama, me despierto, me duermo, me despierto, me duermo, me despierto… con esa idea. Que nos dice…Que significa…
Me pregunto (absurdamente), si esto les pasa a las heteros con los tíos…ostras! Pues debe molar.
Me pasa tan poco y cuando me pasa… amenaza con volverse incontrolable con solo dar un paso (o medio) más.
Supongo que ahí está gran parte del problema…
Ya es tarde para resolverlo (en esta vida). Me temo.
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