No hagas la pregunta…

 Si no estás preparada para escuchar la respuesta…

Has e unos días mi tranquila vida de “series y bolsa” implosionó, sin más…

La vida siempre gana… escribí en un post que no publique pensando en el gafe del blog…

Quita , quita… que no estamos para jugárnosla…

Pero… la cabra (yo) tira al monte… y pensé echarme el iching (del Internet) …

Qué dice? Pues me sale el 56 en el futuro!! 

Oleeeee…

El viajero, el vagabundo…

Ole , ole, ole…

Por si había pocas dudas…

También te diré… que no se si acertó las otra veces…

Solo recuerdo el resultado de dos veces …ya lejanas…

Una acertó y otra no…

La que no… pues fue el día que me dejo la que me incio en esto del iching… nos lo echamos y salió como 4/5 veces “el matrimonio”. Estábamos rompiendo!!! POr Dios!!! Nunca volvimos a vernos después de eso. Así que… aunque ahí no use al chino milenario del internet. Lo interpretaba ella (la que me estaba dejando). Tiaaaaaaa….!!! Me dejas y me dices que Matrimonio 4/5 tiradas después??? 

Después de eso me quede algo pillada (a ver, normal), me lo eche y decía algo de que había que esperar a que ella hiciese un movimiento y éxito seguro . No espere (yo no soy de aguantarme cuando veo algo claro) y claro, salió mal (o bien, según se mire, el caso es que nunca volví a verla a pesar de mi insistencia, que fue mucha. Confieso) . Nunca sabremos si acertó… le concedo el beneficio de la duda, dado que todas sabemos que la estrategia “hacerse la muerta y yo a ti no te conozco de nada” suele ser ganadora.

Bueno, ella tb me decía que tenía unas tiradas estupendas y que sería millonaria (sí o sí). Espero que haya mejorado en su dominio y manejo del librito…

El caso es que… el chino (del Internet) me dice que toca carretera y manta…

La vida siempre gana, amigas mias…

Eso he aprendido estos 46 años de experiencia…

Ha costado! 

No comentáis el mismo error.

(O cometedlo , supongo que la sensación de paz y Harmonía con la vida que os ha tocado será la misma)

Pues esto me tocó en la tómbola, señoras…! 

He visto karmas peores.

No me quejo, no la juzgo (a la vida). La acepto. Me cae hasta bien. Ese toque irónico. Paradójico. Qué perra eres! Pero eres la mía! Que le vamos a hacer! Me caes bien. Sigues sorprendiéndome y haciéndome decir… qué perra es la vida! Como es la vida! Que barbaridad! Siempre gana la hijaputs!