Se me ha colado , vaya usted a saber cómo y por qué, una discusión interna conmigo misma…
Ya la he mencionado (o archivado) aquí pero mi neurona tonta (o lista) insiste…
Todo lo que veo, leo o me ocurre (y no ocurre) pasa por ese tamiz, esas gafas…
¿La aceptación nos lleva a la felicidad?
A veces creo que sí…
Un ejemplo ahora que ya he acabado OITNB…
La rubia, al final, es feliz (tiene esa sensación de todo encaja, va bien) cuando se lía con la pija buenorra. Hasta le gusta a su padre, a sus amigos, su vida empieza a funcionar, se apunta a yoga, va a eventos pijos… hasta lo de pasar la analítica ya no es problema.
Que si , que su tendencia autodestructiva (quien no la tiene?) le hace querer más…
Una relación con alex, lleva de problemas, de subidas, bajadas, de “nada encaja” y por eso es tan magico, tan inevitable. Juntas es todo un desastre para ambas… montaña rusa emocional… pero….
Diossssss!!!! Destrucción total!!! All in!!!
Al final (spoiler) elige la destrucción total…
Todas sabemos que no es la mejor las opciones posibles. Yo sé que tb hubiera optado por la destrucción total (o quizá no, hubiera optado por ninguna de las dos… hubiera esperado (en ello estoy) a esa mujer mágica (inexistente) que me provoque las dos cosas.
Puestos a pedir…
Ahora estoy en fase aceptar mi soledad, aceptar mi papel en esta sociedad, no forzar nada, dejar que las cosas (no) ocurran. Total… he dado decenas de vueltas, abierto cientos de puertas y he acabado en el mismo lugar. El viaje (ninguno de ellos) no mereció la pena…(confieso).
On the other hand, mi formación como Coach me obliga a recordarme que existen una serie de creencias limitantes que nos limitan (ejem, el nombre lo dice)…
Son las creencias? O la realidad contra las que nos pegamos cuando nos creemos “solo son creencias”… y zasca! Ostia contra el muro de realidad…
¿Cual es la solución?
Ni idea!
Pd. Me releo y me autocomento:
Hija mía! Tantas series con personaje en alcoholicos /narcoticos/whatever anónimos y no se te ocurre que ese debate ya está más que resuelto…
“la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, el valor para cambiar las cosas que puedo, y la sabiduría para reconocer la diferencia”.
Solucionado! Siguiente tema…
Y que digan que el blog no vale para nada.
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