A veces con eso es suficiente...
Sentir la atracción inevitable y absurdamente...
Solo nos hemos visto por teams...
Bueno, una vez presencial. Nunca la he visto de pie. Me entrevistó... me puso tercera...en la lista y cuando me reclamó bajo sus dominios ya era tarde, señora.
En la entrevista me recordó a una de las miembras de una pareja ideal que conocí...
Se parece a... como se llamaba? Bueno, no me acuerdo. Es igual . Me entiendo conmigo misma. Compartí una noche con ellas. Sincronía, armonía, equilibrio, atracción física de esa que se nota desde fuera. No eran de esas que solo hablan entre ellas y se apartan del grupo. De hecho yo me pasé toda la noche hablando con la otra. Pero si notabas esos lazos ( magnetismo, quizá?), incluso desde puntas opuestas de la habitación)
Me la recordó sí... supongo que el peinado, el tono de tinte ( ya a estas edades)...
quede de tercera... pero en aquella sala había otra persona a la que seguramente no gusté... quiero pensar. Ella me hubiera puesto de primera... quizá, se me ocurre...
me gusta que me guste...
“Verme” con ella...
no es fácil ( a estas edades) y con mis refinados gustos. Ya siempre me han gustado ( atraído) físicamente poquísimas y ya, a estas edades. Menos.
Pero tiene ese nosequé que sé yo...
Ayer una de sus chicas vino a mi mesa... ella ha dicho que con que estés tú (aquí va nombre y apellido) en la reunión es suficiente...
Sabe mi nombre? Me reclama en la reunión a la que mi jefe le da igual que vaya o que no?
Hemos tenido otras video. Pocas (para mi gusto). No interactuamos. Departamentos paralelos. Niveles distintos. Un mundo nos separa. Yo no puedo hablar (de trabajo) con ella , ni ella conmigo directamente. Todo debe seguir los cauces del organigrama...
Lo sentirá ella también?
Esa atracción , ese magnetismo absurdo e inevitable...
Habrá preguntado por mi al número 2 de mi departamento. Ambas tenemos buena relación con él. Se despiden con “un abrazo” en los mails. normal sería que comentase y se preguntasen por “sus chicos”...
Veremos...
Siempre he sentido que ese era mi lugar en el mundo aunque mi no relación con mi jefe directo haga presagiar el peor de los desenlaces.
Siempre he tenido la sensación d que el universo había confabulado para llevarme a ese lugar del espacio-tiempo rodeada de TRECES...
despachos, salas de entrevista, hasta el número del edificio tiene un 13...
nada puede salir mal (aunque a cada rato parezca inminente y evidente que no fluye con mi jefe directo)
Pero y si...
wait and see...
Me gusta (mucho) que me guste (mucho) ...
Sí, la verdad es que sí...
Sentir esa atracción (mutua?) a estas edades...
No es fácil, señora. No, no lo es.
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