Me quedo con eso…

 Me está gustando la despedida de mi padre. Sí, oye…

Llego de estar todo el día con mi madre, me tomo una cerveza con èl, le cuento el día con mi madre, quizá como hoy , le cuento alguna anécdota como que el taxista me ha preguntado por la plaza de garaje que se vende en el edificio. Me acabo la cerveza y a la cama. 

Después, el sacara de contexto la conversación o mi hermana le dará la vuelta para sabe Dios que..,

Ya saldrá la versión remasterizada y editada de estas conversaciones dentro de algunos meses. 

Yo no estaré, me da igual, la verdad. 

Estoy súper alegre y súper de buen rollo. El viernes me lo notè en el curro cuando decía a todos que no estaría esta semana, me lo noto con los taxistas. 

Que contenta estoy! No es normal… quizá sea esa tendencia mia al equilibrio. Tengo que compensar la tristeza interior con la alegría exterior ( lo normal en mi es tener alegría interior y tristeza exterior). 

Quizá solo es que veo ese fututo mío y estoy decidida a que toda esta toxicidad que he respirado desde siempre no esté en ella. Tomando notas mentales de lo que no, estoy. 

Yo, hasta aquí. Sorry. 

Me merezco que me quieran bien,  coño! 

En los propósitos de año nuevo me pedí eso, porque leí que una debe pedir lo que merece, no lo que quiere. 

Y sí, cada día aquí se confirma. Me lo merezco. La vida, los dioses, el karma me lo deben. Me sale clarísimamente “a devolverl