Yo no me he venido a madrí a esto, ¿o sí?

Desde que leí el artículo de los introvertidos, llevo unos días tranquilita, superagusto conmigo misma, disfrutándome, dejándome tranquila...

quizá debería volver a leer...

antes me gustaba...

¿leer?

esa es otra de esas cosas que he dejado de hacer en Madrí...

el cambio a Madrí supuso, evidentemente (o no tanto) un cambio de casi todas mis rutinas, hábitos, gustos y disgustos...

cada vez que me sorprendo haciendo algo que hacía en la city... me riño y me digo... "yo no me he venido a madrí a esto"...

en la city tenía una supervida ordenadisima... llena de trucos y autoengaños, placebos... podría haber seguido viviendo allí el resto de la vida sin problema... se me da bien llenar "huecos"...

- leía, leía mucho, libros, revistas, periódicos... de todo... los sábados me bajaba al carrefour (ya, ya lo sé, qué poco glamour), elegía un libro y me lo leía el finde... la felicidad (o la tranquilidad) por 5 euros quizá 10...

- andaba, andaba mucho... me iba a la muralla a dar vueltas a lo tonto...

- veía la tele, mucho... cada día una serie, me sabía la programación y cada noche tenía una serie... los lunes csi, los martes, los miércoles, los jueves... ahora no me acuerdo pero cada día... me levantaba pensando que esa noche tendría una serie...

- hablaba por msn, hablaba mucho, con bollo-gente de toda españa...

- pensaba en que el futuro sería un gran sitio para estar, no sabía como pero...lo sentía ... hacia planes, irme a Madrid, comprarme una casa, montar una asesoría pequeñita, hacia calculos con cuatro o cinco clientes... ya casi ganaría lo mismo que ganaba como "empleada por cuenta ajena", una asesoría no es un negocio "caro", un ordenador, una mesa, una silla y poco más... creo que incluso llegué a anunciarme en alguna web de esas de "se llevan contabilidades" por probar...

- casi no salía... si alguien quisiera salir por la city conmigo por la noche, tendría que mirar en internet por qué sitios se sale... por la noche... a qué sitios se va (y mira que la city es pequeña , pequeñisima...)

después... no recuerdo exactamente por qué... un día... decidí que me venía... es curioso... debió haber alguna razón, algo que lo disparó... pero no lo recuerdo...qué curioso...

y llegué a madríd... y

- dejé de leer
y
- dejé de andar a lo tonto, básicamente porque dejé de tener coche y no controlaba el transporte público asi que... caminata tras caminata que te crió...

- dejé de ver la tele, de hecho, mi tele es superpequeña , 14 pulgadas creo, incluso al principio pensé en no tener tele...

- creo que tengo en el msn a una o ninguna persona... en cuanto alguien me dice la frase "no soy de madri pero voy mucho" , corto la relación...

- no pienso en el futuro... quizá porque si pienso en el futuro creo que será un sitio donde no merecerá mucho la pena estar... creo que este momento es el mejor momento de mi vida (sí, ya sé, no parece un gran momento, pero es que cada uno tiene su karma), pienso que en cualquier momento empezará inevitablemente la cuesta abajo... es ley de vida... sé que llegará, por eso no miro al futuro... mi futuro es el café con croissant de las 11 de la mañana...

a veces... vuelta la burra al trigo... me sorprendo refugiada en la lectura, en las series, en las caminatas interminables, en las conversaciones de messenger... pensando en el futuro... pensando que quizá debría de dejar de salir (a lo loco) y porque sí...

y me riño... yo no me he venido a madrí a esto...

pero... quizá... sí me haya venido a madri a eso...

porque cuando me dejo "estar tranquila"... disfruto, realmente lo disfruto... la tranquilidad... del dejarse ir... del dejar de buscar e inventar, la tranquilidad de asumir (y dejarse disfrutar) la realidad... por "pequeña" que esta parezca...

perdonarse la incapacidad para conseguir una realidad a la altura de mis expectativas...

tengo un problema de expectativas... soy una niña de la tele, me eduqué pensando que un chicle podía convertirse en un explosivo... que los planes siempre salen bien... y que los finales siempre son felices...

los lugareños decimos que la city es como una anaconda que te envuelve, te adormila y cuando te das cuenta estás muerto...

suscribo la frase...

quizá tenga razón esa (otra) frase que dice que todos llevamos a nuestra ciudad dentro ... y no hay forma de escapar de ella...

quizá felicidad y tranquilidad estén reñidas... hay que elegir... cuanto quieres de cada una... y lo mío nunca han sido las proporciones...

¿quién sabe?

seguiremos informando...

pd. del pinterest (la última tontería dospuntocero)

quizá sea por aquello de la PNL pero me gustan estas fotos con mensaje positivo... me hacen volver a creer que felicidad y tranquilidad son posibles en algún lugar del espacio-tiempo.