viernes, 23 de marzo de 2012

Todo tiene una explicación lógica...

A veces lees algo, pasa algo y algunas piezas simplemente encajan, ah es eso, no pasa nada, soy una rarita tipica y topica, normal, básicamente... incluso leyendo el artículo "casi" perfecta...

Este post está sacado de la web de "equipos y talento" ... lo leí ayer... y me maravilló... (incluidos los enlaces, ahora que "I can understand")...

Liderazgo Introvertido

Posted on 26 / febrero / 2012


Callados, tímidos, asociales, en definitiva personas algo raritas… Nuestra representación social de las personas introvertidas no parece casar bien con la del liderazgo, que tendemos a vincular a personalidades dominantes. Sin embargo en los últimos meses estamos viviendo todo una eclosión de información alrededor de las virtudes del liderazgo introvertido coincidiendo con la publicación de varios libros e investigaciones. Una portada reciente de Time se hacía eco de la publicación del libro ”Quiet“. Su autora, Susan Cain, escribe el blog The Power of Introverts y acaba de dar una charla en TED, lo que sin duda es la consagración definitiva de este tema en la modernidad.

Ideas de partida

Un artículo fundacional de esta reciente “intro-fascinación” es 10 Myths about Introverts, que se hizo viral en la red y pone el contrapunto a los estereotipos más habituales. Parece que todo, o gran parte, es simple química cerebral: las personas introvertidas se agotan con demasiada estimulación externa porque son muy sensibles a la dopamina, un neurotransmisor relacionado con el placer, todo lo contrario que las extrovertidas que necesitan adrenalina a raudales para que su cerebro genere suficiente dopamina. Sea como sea, la distinta actividad cerebral hace que los introvertidos sean más selectivos con sus interacciones sociales. Sí, disfrutan de la conversación y la socialización, pero en dosis diferentes, y obtienen también gran satisfacción de la soledad y la escucha.

A contracorriente

Las personas introvertidas son entre un tercio y un cuarto de la población y su distinta personalidad y pautas de interacción social no tenían nada de “raro” en el pasado. En The Secret Power of Introverts se explica como hasta el siglo XX vivíamos en una “cultura de carácter” en la que lo que se esperaba de nosotros era un comportamiento social moral y que no llamara la atención. Posteriormente el auge de las ciudades y la moderna gestión empresarial conllevó la importancia de ser capaz de destacarse entre las multitudes urbanas y laborales. Pasamos así a una “cultura de la personalidad” y empezamos a valorar socialmente las personalidades expansivas.

En la actualidad vivimos un auge desmesurado de lo grupal, un new Groupthink, con predominio absoluto de la gestión de equipos, que se refleja en los ambientes educativos y laborales. Espacios abiertos en las oficinas, sesiones de brainstorming, reuniones a todas horas… Sin embargo, este no es siempre el mejor entorno de trabajo para las personas introvertidas. Son personas con mucha creatividad y capacidad de innovación pero sólo si tienen la privacidad y el aislamiento adecuado.

Mejores líderes, líderes diferentes

Las cualidades de los líderes introvertidos, como pensar antes de hablar, tener más tendencia a profundizar o transmiter calma, son una buen contrapunto a otros liderazgos más tradicionales, e incluso mejores en determinados contextos. Una investigación de Harvard ha puesto de manifiesto que los líderes introvertidos son mejores cuando hay abundancia de empleados proactivos, ya que su capacidad de escucha permite liberar todo el potencial del equipo. Hay también quien sugiere que por todas estas razones podrían ser los mejores mentores de la generación Y.

Como con cualquier concepto de gestión novedoso, sobre todo si viene de Estados Unidos, abundan ya las listas de recomendaciones prácticas de cómo aprovechar el poder de los introvertidos. El problema, en mi opinión, está en que nuestros sistemas de gestión del talento no están diseñados para identificar talento introvertido ya que estas personas difícilmente se auto-promocionan y llaman menos la atención en todos los sentidos. Carecen de esas típicas “virtudes” de acción, asertividad y personalidad dominante que tanto nos gustan en las organizaciones.

¿Una nueva identidad?

Desde una perspectiva de gestión de la diversidad, el auge de “l@s introvertid@s” sirve para conceptualizar a qué nos referimos cuando hablamos de definir el talento y el liderazgo desde una perspectiva más amplia. Muchos hombres y mujeres “diferentes” se verán por fin reflejados. Sin embargo corremos el riesgo de crear una nueva categoría social, una nueva identidad con dos polos, cuando lo cierto es que la introversión-extroversión es un continuo en el que todos nos situamos. Además se trata de un continuo dinámico, no una condena absoluta de por vida, como nos recuerda Daniel Goleman en “Are you too shy to lead?“.

Sospecho también que estamos ante un concepto de gestión muy occidental porque la personalidad se moldea en un contexto cultural, de ahí que el estilo asertivo expansivo sea más díficil de encontrar en las culturas asiáticas. Con todo, bienvenido sea el concepto y la creciente investigación. Al final, la gestión de todas estas diversidades no supone otra cosa que la gestión de las individualidades, aunque para ello todavía tengamos mucho proceso y concepción limitada de “talento” que desmontar…


Casi toda la vida ·"luchando" contra... todo lo que cuenta el artículo...

- la necesidad de poca gente, porque se me gastan las pilas y me pongo en mode ahorro energía si hay más de tres personas...
- la necesidad de recargar pilas en mi soledad...
- la incapacidad para mantener varias "amistades" simultanéas (me agota)
- el ser mejor "sola"
- el ser mejor "por escrito", en mi casa... tranquilamente...
- por eso, quizá, bea solo existe entre estas cuatro paredes...
- los efectos retardados... (el lunes me dí cuenta que me había gustado "mucho" la peli del sábado)
- el transmitir calma (llegando casi al aburrimiento, quizá incluso a la paralisis, a la velocidad de crucero...al ralentí...)
- lo de la dopamina... necesito muy poquito para "pasarlo bien"... cuando yo ya estoy "borracha" de disfrute, los demás todavía están durmiendo...

y tantas cosas que están en los enlaces del artículo... lugares donde me encuentro y reconozco ... cuando me quedo sola... lugares que me gustan... pero... que no son "sanos" según "la cultura occidental"...

quizá por eso... me sigo "forzando" a quedar, quedar y quedar... quizá porque en el fondo me he creído que eso de "estar mejor sola" no es del todo bueno y podía "aprender", "acostumbrarme"... pero solo consigo certificarme a mí misma una y otra vez que... estoy mejor sola, que me siento mejor sola... que lo disfruto todo más sola, sin interferencias y que "ella" será esa persona con la que me sienta igual que cuando estoy sola conmigo misma...

no, todavía no ha llegado...

pd: joer, qué bueno... yo no podría haberlo explicado mejor...

So here are a few common misconceptions about Introverts (not taken directly from the book, but based on my own life experience):

Myth #1 – Introverts don’t like to talk.
This is not true. Introverts just don’t talk unless they have something to say. They hate small talk. Get an introvert talking about something they are interested in, and they won’t shut up for days.

Myth #2 – Introverts are shy.
Shyness has nothing to do with being an Introvert. Introverts are not necessarily afraid of people. What they need is a reason to interact. They don’t interact for the sake of interacting. If you want to talk to an Introvert, just start talking. Don’t worry about being polite.

Myth #3 – Introverts are rude.
Introverts often don’t see a reason for beating around the bush with social pleasantries. They want everyone to just be real and honest. Unfortunately, this is not acceptable in most settings, so Introverts can feel a lot of pressure to fit in, which they find exhausting.

Myth #4 – Introverts don’t like people.
On the contrary, Introverts intensely value the few friends they have. They can count their close friends on one hand. If you are lucky enough for an introvert to consider you a friend, you probably have a loyal ally for life. Once you have earned their respect as being a person of substance, you’re in.

Myth #5 – Introverts don’t like to go out in public.
Nonsense. Introverts just don’t like to go out in public FOR AS LONG. They also like to avoid the complications that are involved in public activities. They take in data and experiences very quickly, and as a result, don’t need to be there for long to “get it.” They’re ready to go home, recharge, and process it all. In fact, recharging is absolutely crucial for Introverts.

Myth #6 – Introverts always want to be alone.
Introverts are perfectly comfortable with their own thoughts. They think a lot. They daydream. They like to have problems to work on, puzzles to solve. But they can also get incredibly lonely if they don’t have anyone to share their discoveries with. They crave an authentic and sincere connection with ONE PERSON at a time.

Myth #7 – Introverts are weird.
Introverts are often individualists. They don’t follow the crowd. They’d prefer to be valued for their novel ways of living. They think for themselves and because of that, they often challenge the norm. They don’t make most decisions based on what is popular or trendy.

Myth #8 – Introverts are aloof nerds.
Introverts are people who primarily look inward, paying close attention to their thoughts and emotions. It’s not that they are incapable of paying attention to what is going on around them, it’s just that their inner world is much more stimulating and rewarding to them.

Myth #9 – Introverts don’t know how to relax and have fun.
Introverts typically relax at home or in nature, not in busy public places. Introverts are not thrill seekers and adrenaline junkies. If there is too much talking and noise going on, they shut down. Their brains are too sensitive to the neurotransmitter called Dopamine. Introverts and Extroverts have different dominant neuro-pathways. Just look it up.

Myth #10 – Introverts can fix themselves and become Extroverts.
A world without Introverts would be a world with few scientists, musicians, artists, poets, filmmakers, doctors, mathematicians, writers, and philosophers. That being said, there are still plenty of techniques an Extrovert can learn in order to interact with Introverts. (Yes, I reversed these two terms on purpose to show you how biased our society is.) Introverts cannot “fix themselves” and deserve respect for their natural temperament and contributions to the human race. In fact, one study (Silverman, 1986) showed that the percentage of Introverts increases with IQ.

“You cannot escape us, and to change us would lead to your demise.” <-- I made that up. I'm a screenwriter. It can be terribly destructive for an Introvert to deny themselves in order to get along in an Extrovert-Dominant World. Like other minorities, Introverts can end up hating themselves and others because of the differences. If you think you are an Introvert, I recommend you research the topic and seek out other Introverts to compare notes. The burden is not entirely on Introverts to try and become "normal." Extroverts need to recognize and respect us, and we also need to respect ourselves. Let me know your thoughts.



4 comentarios:

  1. ...."la necesidad de poca gente", por eso tienes tu blog , no nos puedes ver, ni escuchar, ni conocer, ni siquiera leernos si no quieres, somos muchxs y ala vez nadie.
    "Estas mejor sola", pues claro mujer, cuando las cosas se hacen "forzadas"" (a quedar y quedar) nada fluye, y logicamente acabas por pensar que como contigo, con nadie.
    ¿que quieres que cuando "ella" aparezca tu te siguas sintiendo igual que te sientes cuando estas sola contigo misma? cuando estás sola tus pensamientos se centran en tí misma, y "ella" debe acompañarte en ese camino, si no te acompaña para que la necesitas.
    "Ella" aparecerá para romperte tus esquemas, aparecerá para cambiar tu mundo, tal y como lo percibes ahora,aparecerá para "estar" y para "ser".

    saluditos extremeños

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  2. creo que esa fase "encontrar a alguien que me cambie los esquemas" ya la he superado (la experiencia es lo que tiene), al final... las cosas caen por su peso y la cabra tira al monte... quizá sea el momento de buscar (y quizá encontrar) a alguien a quién le gusten mis esquemas (y no quiera ni pueda cambiarlos)

    solamente porsiacaso

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  3. joder que suerte, será que me falta experiencia y me sobra edad, jaja.
    tendré que ponerme las pilas y acorazarme ante la posibilidad de que se a yo la que pierda los esquemas cuando "ella" aparezca.

    solamente porsiacaso
    saluditos extremeños

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